5.1. La iconosfera contemporánea.
¿Sabes qué es la dependencia emocional? Esta es un estado psicológico relacionado con las relaciones, no sólo romántico-afectivas, sino también de amistad y parentales; que se caracteriza por una excesiva necesidad de afecto y atención, como “solución” a las carencias afectivas de quien la padece. Las relaciones de pareja formadas con una persona dependiente emocionalmente suelen ser inestables y destructivas, donde esta persona idealiza y magnifica a la otra (en el caso de ser una relación monógama) u otras (en el caso de ser una relación no monógama). Además, la situación se puede volver completamente insostenible si otra de las partes de la pareja utiliza la dependencia en su favor para posicionarse “por encima” y manipular a la persona dependiente.
Si bien esto ocurre desde mucho antes de la aparición de las redes sociales, lo cierto es que con su utilización se ha incrementado este trastorno, e incluso las personas que la padecen cada vez son más jóvenes, llegando a estar entre los 15 y los 16 años las más jóvenes. Acciones como espiar el Facebook de tu pareja, revisar su última conexión a WhatsApp o mirar sus fotos de las últimas vacaciones repetidamente son muy usuales hoy en día. La dependencia emocional funcional de la misma manera que cualquier otro tipo de adicción, pero en este caso no se es adicto al alcohol o las drogas, sino a la persona amada.
La posibilidad de contactar con esa persona con sólo un par de toques ha hecho que se convierta en algo incluso más impulsivo, pues antes no era posible, pero hoy en día podemos saber de alguien casi las 24 horas del día. Algunos rasgos característicos de las personas con dependencia emocional son, por ejemplo, la necesidad de contacto continuo (y el brote de ansiedad en el caso de no recibir respuesta), la necesidad de aprobación por parte de la pareja, y, tras un tiempo, la pérdida de individualidad y privacidad.
Sin duda alguna, lo más importante es saber salir de una relación tóxica construida en base a la dependencia emocional, conseguir tener algo de autoestima para salir adelante y, en el futuro caso de conocer a otra persona con quién establecer un vínculo romántico estable, partir de una base donde ambas partes de la pareja sean iguales, fomentando así una relación sana.
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