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En las décadas de los 80 y 90 grandes músicos africanos coparon los mejores festivales de Jazz internacional, artistas de la talla de Yossou Ndour, Fela Kuti, Salif Keita o Manu Dibango. La caboverdiana Cesaria Evora obtendría varios galardones de reconocimiento internacional, y en menor medida su compatriota Tété Alhinho, también. Y entre tanto virtuoso, Mory Kanté, cantando en guinenano, logró ser número uno en buena parte de las emisoras de radio en Europa y habitual en las pistas de baile, con su famoso Yeke-Yeke.
La puesta en escena, en las actuaciones del artista, eran sinónimo de energía, las túnicas blancas y los bailes tribales se combinaban con instrumentos exóticos, mientras el cantante, junto con el coro de niños, parecía hacer una llamada a la acción. El éxito de esta canción tuvo que ver con saber combinar el folclore y la moderna música electrónica.
Actualmente, el Dj ugandés Eddy Kenzo, es el músico africano más reconocido a nivel internacional. En cierta medida la fama del Dj, también, está ligada al transmitir la cultura y los bailes de su país, sin la necesidad de la puesta en escena anteriormente descrita con Mory Kanté, ya que pasaría desapercibido por cualquier rapero extravagante.
Por un lado, los videos de los niños y niñas de Masaka, ciudad natal del Dj ugandés, que competían de una manera sana colgando videos a YouTube por ver quien conseguía más seguidores, mientras bailaban sus canciones. Por otro lado, unos comediantes (Manala&Friends), que con las mismas canciones y mucho desparpajo, se encargan de ridiculizar todo tipo de tópicos, así como el de unos paletos andando de forma extraña y que mientras comen, con la boca llena, expulsan migas de pan por su boca; la mujer nalgona que viste con paños de colores vivos y baila con ritmo desenfrenado; el travestido King Kong lady, que mientras baila y practica artes marciales hace evidente el tamaño de lo que cuelga detrás de su vestido; o el revolucionario que levanta el puño a todas horas y tiene una guitarra con forma de escopeta y un matón detrás para tratar de conseguir orden.
Tanta energía positiva no podía pasar desapercibida, y Eddy Kenzo decidió incorporar a los niños y a los comediantes a varios de sus videoclips, ya que en la mayoría de ellos trata de mostrar la cultura de su país con bailes y las diferentes vestimentas de sus habitantes, se ven mujeres y hombres con la cabeza tapada y otros que la llevan descubierta, así como la mezcla de vestimenta tribal y occidental.
Si buscas Eddy Kenzo en google, lo primero que te aparece es que su música pertenece al género popular africano, y creo que esta música electrónica, si está considerada así, es por culpa de los maravillosos videoclips que tiene este Dj. No creo que para disfrutar de la música sea necesario el videoclip, pero el caso de este artista es una excepción donde la radio no puede llegar.
Actualmente muchos programas de radio graban su emisión en video, para colgarla a YouTube. Me parece innecesario, ya que el video no aporta nada, solo pone cara a las vulgaridades de lechuguinos de moño insumiso, que creen que por burlarse de las tradiciones son modernos.