4.3. El documental. Tipos de documentales. El documental como documento cultural.
Estas últimas semanas he tenido el placer y la fortuna de sumergirme en el universo de Ferrán Adrià y el Bulli. Un mundo que realmente me ha sorprendido y ha conseguido encantar cada uno de mis sentidos a través del documental “Un día en el Bulli”. No sólo eso, también ha sido una fuente inacabable de aprendizaje para mí, un aprendizaje constante sobre innovación, transformación y creatividad. Pero curiosamente, no ha sido ninguno de estos tres conceptos el que ha bombardeado mi sentir, el que ha invadido mi pensar… sino el concepto de evolución. Al final te das cuenta de que la creatividad, la transformación o la innovación son importantes, pero no dejan de ser procesos, son el hilo a conductor a un camino que nunca tiene fin, el camino a evolucionar. Ésta ha sido la gran inquietud de Ferrán y el motor del Bulli, la infinita evolución de algo que tiene un principio, pero que carece de final o límites. Llegar al final de cada proceso y preguntarse como reinventarse, preguntarse cual es la siguiente forma en la que deben convertirse, entender que la única forma de que los grandes conceptos se mantengan es a través de una evolución constante, entender que estancarse no es una opción.
Dicho esto, la mejor forma de echar al plato esta experiencia es desmenuzándola en varias recetas, son las siguientes:
- ABRE LA MENTE.
“Yo no me dedico a la cocina, me dedico a la creatividad”. De esta forma hace referencia Adrià a su labor profesional. No hace mucho leí a Steve Jobs diciendo algo muy parecido, “No somos una empresa tecnológica, en realidad somos una compañía de marketing”. Es curioso que dos personas que han revolucionado tanto el mundo gastronómico como el tecnológico coincidan en definir sus funciones como algo distinto a lo que se les supone. Es necesario mirar más allá, estar abierto a oír, aprender y aplicar conocimientos de otras disciplinas y artes. Muy a menudo pensamos que ser especialista de algo, es cerrar las miras en cuanto a ello y no mirar a los demás paisajes, lo que acaba por condenarnos a un tibio proceso involutivo.
- LA CONCEPTUALIZACIÓN.
“Lo importante no es ser el primero, es saber conceptualizarlo” Hay miles de cosas que ya existen, que fueron creadas por otras personas para un uso y momento concretos. Cuando cogemos esas mismas cosas y las llevamos a un nuevo uso, escenario o tiempo, estamos logrando un nuevo concepto, por lo tanto estamos creando igualmente. Ferrán puso un ejemplo que ayuda a entender este punto con claridad:
La minifalda la creó Mary Quant, sin embargo, el concepto ya existía incluso en la época de los romanos. Pero obviamente no es lo mismo un romano con “minifalda”, en la puerta de un castillo, preparado para derramar sangre que una señorita con minifalda, mostrando sus
encantos. La prenda ya existía, Mary Quant “sólo” la conceptualizó, pero para el mundo, esa prenda nunca había existido…
- TRANSFORMACIÓN.
El transformarse necesita un alto contenido de dos sustancias, valentía e intuición. Ya que normalmente el momento de mutar es justo cuando las cosas funcionan en plenitud, cuando están en su punto más álgido, en ese momento en el que al ADN del negocio ha invadido la mente de gran parte de su público. Cuando Ferrán comunicó el cierre del Bulli, el negocio vivía justamente esta etapa, fue una gran sorpresa a nivel mediático, una decisión que pocos entendieron, pero él lo tenía claro: “Vi que el mismo formato no iba a funcionar. Lo habíamos estrujado al máximo. Necesitábamos hacer algo para poder seguir creando al nivel que habíamos alcanzado. Me empezaba a aburrir. Todo se volvía monótono. Necesitábamos un reto”.
- EL RETO.
El reto te mantiene vivo, hace chispas en tus neuronas, alboroto en tu sangre… Cuando te propones un objetivo ambicioso, y lo retas sanamente una y otra vez, se convierte en una llave capaz de abrir cualquier puerta, incluso las que no tienen cerradura, también en un motivante juego, en un tira y afloja entre él y tú que te lleva a disfrutar de cada golpe cruzado, te lleva a aceptar que en el camino habrá situaciones complicadas, pero entenderás que es parte del reto. Es fundamental retar a nuestros objetivos si queremos conseguir algo grande, si queremos inventar nuevos lenguajes aún desconocidos para el mundo.
- INNOVACIÓN.
La innovación debe apoyarse en cuestionar todo a nuestro alrededor. “Que pasaría si hiciéramos…?”, “Por qué no probamos…?”, “Para qué más podemos usar…?”, “Y si…?”. Este tipo de cuestiones nos llevan a ver ventanas que antes eran imperceptibles, porque suponen cuestionar la realidad, lo tangible y lo consolidado incesantemente, porque suponen un rechazo y un bloqueo a toda costumbre o tradición, que se convierten en posible elemento de freno para nuestro avance…
- HACER MAGIA.
Esto es lo único que vale, estás dispuesto a hacer magia? si no es así estás fuera del proyecto. Cada uno de los que entran en el negocio deben creer en esto, lo que supone una implicación y dedicación máxima en la labor, también supone que estás rodeado de gente capaz de ver más allá de lo común. Creo que es obvio que Ferrán Adrià consiguió este punto en su proyecto, esto es lo único que explica que muchos de los cocineros que han pasado por El Bulli, se hayan convertido más tarde en dirigentes de restaurantes considerados entre los mejores del mundo. Posiblemente tiene mucho que ver con esa exigencia constante por descubrir y mejorar, que termina obligando a sus trabajadores a convertirse en referencias de sus artes.